Si buscamos el componente «emoción» en estos formatos de competición de fases cortas (diez partidos), lo encontraremos en el hecho de que cada duelo contiene un alto grado de trascendencia. Cada acierto suma. Cada error se paga. Y en esa tesitura alcanzamos la séptima jornada de la 1ª fase de la categoría. Todo duelos decisivos. Muchísimo en juego. Especial atención al que disputarán Cabomar y San Blas, ambas escuadras con un triunfo. Quien pierda, estará muy cerca del adiós. Quien gane empezará a exhalar su aliento en la nuca del grupo de equipos en el que se encuentra la Fundación Lucentum.
El conjunto dirigido por Jose Sánchez dio muestras en grandes dosis de lo que es capaz el pasado sábado frente a Cartagena. Para bien y para mal. Vimos el poder de asfixia de la defensa lucentina, pero también asistimos a un apagón que ni la noche invernal del Polo Norte. Y no fue la primera vez que el Hotel Maya FLBA sufrió de bipolaridad esta temporada. Lo dijo Jose Sánchez en la previa de aquel partido y lo repite en la del de mañana. «Debemos ser más constantes en nuestro juego», insiste el preparador. La pívot Noelia Sánchez está de acuerdo. «Tenemos que saber manejar el partido, mantener la cabeza fría», apunta. La consigna parece clara. Toca aplicarla mañana.
El técnico lucentino no podrá contar una semana más con Carly Schmidt. Los temas administrativos de la jugadora estadounidense siguen a la espera de resolución.
Si algo dejó claro Adesavi en la ida es que es un equipo hecho para pelear contra todo y contra todas. Aquel partido, resuelto por 50-52 a favor de las sanvicenteras con un 2+1 en el último segundo, fue digno de una película de Hitchcock. Suspense en estado puro. Para Jose Sánchez, la clave estará «en el rebote». El técnico lucentino sostiene que las de San Vicente juegan «muy duro» y «anotan mucho en segundas oportunidades». «Controlar el rebote en ambos aros será fundamental», sentencia.
El pabellón de la Universidad de Alicante acogerá mañana en máximo horario matutino, a las 9:30h (sí, sí, han leído bien) un envite presumiblemente decisivo para el devenir de la Fundación Lucentum en la competición. «Vamos a por esa victoria», afirma una convencida Noelia Sánchez. A confiar.